Olga Mendigoli, secretaria de la mujer en CCOO, y Concha Pérez, secretaria de UGT, celebraron ayer desde sus entidades el Día Internacional de la Mujer aportando una serie de reflexiones críticas con la nueva reforma laboral que, según observaron, daña especialmente a la situación de la mujer, ya de por sí en situación de desigualdad respecto al hombre.
Con la nueva reforma laboral el empresario puede tomar medidas unilaterales que afecten al sueldo, horarios y movilidad geográfica, aspectos sobre los cuales la mujer ya cuenta con desventajas evidentes, como señalaron las representantes de las confederaciones sindicales, quienes apuntan que en caso de cambiar la ubicación del trabajo a una mujer esta tendrá que abandonar el empleo, ya que seguramente no querrá dejar la familia.
Otro de los puntos a tener en cuenta de la nueva reforma laboral es en relación a los planes de igualdad y conciliación que se pactaban a nivel de empresa por convenio y que a partir de ahora ya no será así. Los contratos temporales de las mujeres son muy precarios y la mayoría trabajan en empresas con menos de 50 trabajadores con lo que los problemas a los que se puede enfrentar la trabajadora serán mayores. Prestaciones, como los 100 euros por hijo menor de dos años, desaparecen. La reducción de jornada por el cuidado de un menor ahora se gestiona día a día, no como el trabajador desee si, por ejemplo, trabaja por turnos. En cuanto a la lactancia, con la nueva reforma sólo se puede salir del trabajo por horas y no son acumulables en días como antes hacían la mayoría.
La situación laboral y la conciliación familiar se ven así más perjudicadas que antes, “se cierra la puerta del avance que habíamos conseguido en tema de igualdad en el empleo, ahora vamos hacía atrás en los temas de igualdad”, aseguraron.
Una cifra, negativa, se está igualando por otro lado. En Menorca ya hay 3.778 mujeres desempleadas mientras que el número de hombres parados es de 3.743.
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