UGT presenta su Balance de Legislatura 2011-2015: Cuatro años de regresión social y económica.
Las políticas económicas, laborales y sociales del Gobierno han provocado
una ruptura del modelo de convivencia
UGT | miércoles, 25 de noviembre de 2015
La Unión General de Trabajadores ha presentado esta mañana su Balance de
Legislatura 2011-2015 "Cuatro años de regresión social y económica".
El acto, que ha sido presentado por el Secretario de Acción Sindical del
sindicato, Toni Ferrer, ha contado con las intervenciones de Carmelo Ruiz de la
Hermosa, Secretario General de UGT-Madrid; Benjamín Prado, escritor; Yolanda
Valdeolivas, Catedrática de Derecho del Trabajo (UAM); Emilio de la Peña,
periodista y analista económico.
El Secretario General de UGT, Cándido Méndez, que ha clausurado el acto, ha
subrayado en primer lugar que en esta legislatura "la reforma laboral, las
políticas fiscales y el debilitamiento de los servicios públicos han provocado
una ruptura del modelo de convivencia".
Durante su intervención ha recordado que "es verdad que durante esta
legislatura hay 439.000 parados menos, pero hay 540.000 personas menos en la
población activa, (una cifra superior a la bajada del paro), se han perdido más
de 5 millones de contratos indefinidos durante la recesión económica y hay más
de 2.100.000 parados de muy larga duración, (727.000 más que en 2011), pero es
que además, en España hay 560.000 empleos a tiempo completo menos que en 2011 y
es, junto con Grecia, el país de Europa donde más han aumentado los obstáculos
para acceder al mercado laboral".
"Se ha producido, por tanto, un deterioro brutal del mercado
laboral", pero no sólo eso, a lo largo de estos años "se ha producido
una ruptura en nuestro modelo de convivencia que ha socavado la cohesión social,
ha debilitado la estabilidad política y democrática y ha desatado los temores y
las incertidumbres de la población, y normalmente, cuando eso ocurre encuentran
allanado el camino los populismos y los nacionalismos".
"Esta es una legislatura que hay que tener muy presente" ha
destacado, "porque los primeros que van a pretender que olvidemos su
impacto son los que están en el partido del Gobierno. Y la actual coyuntura se
lo puede facilitar, ya que el debate secesionista de Cataluña, y ahora, desgraciadamente,
el impacto terrible de los atentados y el terrorismo yihadista en Francia
pueden hacer que todo el debate político y social gire en torno al temor, a la
seguridad orillando la libertad y la solidaridad y conducir a la opinión
pública a un olvido transitorio".
Méndez ha subrayado que en estos cuatro años como consecuencia del paro,
los malos empleos, los bajos salarios y el debilitamiento brutal de los
servicios públicos en nuestro país se ha producido de manera muy abrupta
"una polarización social y se han roto axiomas como aquel por el que todos
creíamos que de la garantía del empleo de manera automática se desprendía un
remedio contra la pobreza y que la historia siempre garantiza, en el momento
presente, un progreso en relación con momentos anteriores".
"Ante esa situación" ha subrayado, "hay que buscar
alternativas de urgencia porque estamos en un círculo vicioso que es el que se
puede definir como la socialización de la pobreza. Por el tipo de política
fiscal que se está imponiendo que viene a beneficiar a los que más tienen en
perjuicio de los que menos tienen y no hay ingresos suficientes para remediar
el impacto de la pobreza".
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